Las consultas sobre cómo realizar un testamento se están viendo incrementadas así como las peticiones de copias autorizadas
La pandemia ha derivado en un incremento de las gestiones sobre testamentos. La Covid-19 ha provocado la muerte de cerca de 17.000 personas en España. Los contagiados ya superan la barrera de los 160.000 de acuerdo a la estadística oficial del Ministerio de Sanidad.
La incidencia de la enfermedad está siendo más notable en los mayores de 60 años y la letalidad se concentra en mayor medida en los ancianos de 80 años en adelante. Pero también mata a personas jóvenes y sin patologías previas. España se ha convertido en el lugar con más muertes por millón de habitantes.
En este contexto de crisis sanitaria sin precedentes las consultas sobre cómo realizar un testamento se están viendo incrementadas así como las solicitudes de copias autorizadas de este tipo de documentos. Madrid y Cataluña son las comunidades más afectadas por la pandemia y, por ende, las regiones donde las notarías afrontan un mayor volumen de trámites.
«En Madrid están falleciendo centenares de personas al día. Muchas de ellas son mayores y, por lo general, ya habían hecho sus testamentos. Hay más solicitudes de copias, que están en el Archivo General de Protocolos, pero el confinamiento hace que los herederos no se desplacen a por ellas de forma presencial», explica el notario Rafael Cervera desde el Colegio Notarial de Madrid.
Tanto el servicio público registral como el notarial están considerados servicios esenciales. Por ello, el cese de su actividad no está contemplado en el Real Decreto-ley, 10/2020 de 29 de marzo que el Gobierno aprobó para reducir la movilidad de la población durante la pandemia. Los notarios españoles están manteniendo el personal indispensable para la prestación de manera presencial de una serie de servicios mínimos. Las notarías están abiertas para atender «urgencias».
«Todas esas miles de peticiones que ahora están en standby se activarán cuando se levante el confinamiento. Prevemos muchísimo trabajo», asegura Cervera.
El Archivo General de Protocolos reúne, conserva y mantiene en uso todos los libros de protocolos de los notarios del Colegio de Madrid para el servicio a los consumidores. Bien por causa de jubilación, o bien por fallecimiento, traslado o por cualquier otra forma de cese en la actividad los notarios que han cerrado sus oficinas llevan ahí los protocolos.
Para poder solicitar copias de testamentos, los solicitantes deben ser parte interesada de estos. En el caso de que los comparecientes hayan fallecido, los herederos pueden pedir copia aportando el original del certificado de defunción que se obtiene en el Registro Civil y copia autorizada del testamento.
Fuentes de Legalitas afirman que las consultas sobre testamentos han aumentado, aunque menos que las relacionadas con Derecho Laboral como, por ejemplo, los ERTE. Según los datos del despacho de abogados, las consultas sobre trámites sucesorios habrían aumentado un 20% con respecto a fechas anteriores al coronavirus.
«A día de hoy, una de cada tres consultas relacionadas con la gestión de herencias, es sobre cómo hacer un testamento», explican. Aunque aclaran que si bien el interés por los testamentos ha aumentado, este representa un porcentaje menor que los temas laborales o de consumo.
Rafael Díaz Escudero, notario de guardia del Colegio Notarial de Andalucía en el momento de escribir este artículo, explica que durante el estado de alarma los servicios están muy «restringidos». «El notario ha de valorar los casos de urgencia. Se nos han limitado las salidas fuera de la notaría. Es habitual que salgamos para hacer gestiones en domicilios o en hospitales, pero ahora necesitamos justificar la salida ante el Colegio y que este valore si nos autoriza», explica.
Así, los notarios prestan el servicio de urgencia en la notaría y bajo condiciones sanitarias de prevención adecuadas. Y muy excepcionalmente, pueden pedir permisos.
Díaz Escudero señala que el artículo 701 del Código Civil también prevé la formulación de otra modalidad de testamento «en los casos de epidemia». Sin embargo, esta opción implica la presencia de tres testigos mayores de 16 años y no pueden ser beneficiarios del testamento, por lo que es difícil que se pueda llevar a cabo en una situación de confinamiento. La reclusión se suele hacer con familiares cercanos.
Ese artículo está vigente en España desde la elaboración del propio Código Civil en el año 1889 y no se había articulado hasta la fecha. «Es muy antiguo y el procedimiento es muy complicado», considera el notario sevillano.
Desde dPG Legal explican que este tipo de testamentos tienen un plazo de validez muy limitado. «Transcurrido dicho plazo el testamento quedará ineficaz: el periodo de presentación es de dos meses desde el cese de la declaración de epidemia. Después, el testador tendrá que acudir a la notaría a otorgar nuevo testamento, para que el mismo tenga validez», apuntan.
«En caso de fallecer la persona que ha otorgado testamento, los testigos disponen de tres meses para acudir al notario y protocolizar ese testamento», concluyen.
Otra opción compatible con otorgar testamento sin salir casa es el testamento ológrafo. De acuerdo a dPG Legal es posible realizar este testamento en cualquier momento, es decir, se puede llevar a cabo en un contexto o no de pandemia.
«Se caracteriza por estar escrito de puño y letra por el testador. Para otorgar este testamento, es necesario ser mayor de edad, estar escrito por completo y firmado por la mano del testador y debe llevar fecha exacta. Una vez realizado el documento, puede guardarse en un lugar específico, indicándole a alguna persona de confianza dónde se encuentra, o confiándolo a esta persona», detallan. MARINA ALÍAS. https://www.vozpopuli.com/politica/consultas-espanoles-testamentos-crecen-pandemia_0_1344466343.html